Estados
Unidos después de 1991: ¿Hiperpotencia o declive?
¿La desaparición del
bloque soviético confiere a los Estados Unidos el monopolio de la hegemonía
mundial?
1 ¿Qué hegemonía?
Ø La desaparición del bloque soviético hace de
Estados Unidos la única potencia hegemónica. Algunas elites desean aprovechar
“el fin de la historia” (F. Kukuyama) para actualizar el intervencionismo de
Wilson. Los Estados Unidos cesan de sostener
a dictaduras consideradas anteriormente como el mal menor, favoreciendo
las transiciones democráticas en América latina, en África del Sur, en
Filipinas, etc. Otros observan que el fin de la lógica bipolar exacerba los
conflictos locales, o, siguiendo a S.P. Huntington, temen “un choque de civilizaciones” que opondría fundamentalmente el
Islam a Occidente.
Ø Estimulados
por la globalización financiera, el desarrollo de nuevas tecnologías de la
información y de la comunicación y el retroceso general de los obstáculos a los
intercambios internacionales, las empresas americanas tienen un horizonte
planetario. La Casa Blanca apoya este proceso: es wilsoniano considerar que la
liberación de los intercambios favorecen la prosperidad, base de la paz. (Doc.
4)
Doc. 4 Las bazas del podr americano en los inicios del siglo XXI |
2 El líder del mundo globalizado
Ø La
anexión de Kuwait por el Irak de Saddam Hussein permite al presidente G. Bush
conciliar internacionalismo e interés nacional: la coalición que se enfrenta a
Irak es grande pero los Estados Unidos conservan el papel principal (Doc. 2).
Fortalecen su posición en Oriente
Próximo: aseguran los flujos de petróleo e intentan apaciguar las tensiones
árabe-israelís.
Ø Durante
los dos mandatos de Bill Clinton (1993-2000), se da prioridad a la economía
(incluso sobre la política exterior). Si el crecimiento es menos sostenido que
en los países emergentes, es mayor que en el resto de los países de la OCDE.
Los Estados Unidos parecen una hiperpotencia: atraen a millones de inmigrantes y
disponen de todas las palancas de influencia.
Doc. 2 El portaviones Dwight D. Eisenhower participó en 1990 en la operación "tormenta del desierto" contra Irak, que había invadido Kuwait |
3 El siglo XXI: dudas e inquietudes.
Ø Los
atentados del 11 de septiembre de 2001 desmienten la esperanza de un mundo en
paz, vigilado por un “imperio benefactor”. La administración Bush piensa
conjurar las amenazas por la ampliación de la OTAN a la “nueva Europa”, la del
Este, por la aproximación a India y sobre todo por la “guerra al terrorismo”.
Se involucra en Afganistán, después en Irak, sin el aval de la ONU. El objetivo
declarado, la estabilización del “gran Oriente Próximo”, no se alcanza. La
opinión favorable al principio, se inquieta cuando se alarga la lista de
muertos. Eligiendo en 2008 al demócrata Barack Obama, se decanta por uno de los
pocos senadores hostiles a la intervención en Irak.
Ø En
el plano económico, las crisis bursátiles y financieras se suceden, ligadas a
los movimientos especulativos de capitales y al superendeudamiento de los
americanos. El déficit comercial se agrava y los capitales extranjeros se
convierten en indispensables para equilibrar las cuentas exteriores y cubrir el
déficit del Estado federal. En este contexto, el fantasma del declive parece
perfilarse, mientras que la situación de Estados Unidos –y del Occidente en
general- contrasta con el dinamismo de los países emergentes, sobre todo del de China (Doc. 1). Sin embargo, esto es minusvalorar las
bazas que conserva la primera potencia mundial (Doc. 3 y 4).
Doc. 1 El peso de Estados Unidos en la economía mundial, 1992-2009. Porcentaje del PIB con respecto al total mundial. |
Doc. 3 La posición de los Estados Unidos en el mundo
a principios del siglo XXI
¿Cómo, según usted, América puede
defender sus intereses en un mundo multipolar?
El mundo no es multipolar.
No es tampoco un mundo constituido por un Leviathan y de liliputieneses. Es un
mundo en el que existen potencias regionales significativas, de las que algunas
podrían un día, aunque esta perspectiva sea por el instante lejana, convertirse
en potencias mundiales. […]
¿Qué se espera de América en el
siglo XXI? ¿Qué reafirme su liderazgo?
Y su compromiso con
ciertos principios fundamentales de justicia, dignidad, igualdad: el mensaje
humanista de América. Se trata de un
país único en este sentido, que ha atraído a muchos individuos diferentes [que
buscaban] por la oportunidad
material que América ofrecía, pero también por su idealismo. La combinación de
idealismo y de materialismo es algo muy poderoso, y que funciona. […]
Entrevista Zbigniew
Brzezinski, antiguo consejero de seguridad nacional del presidente Carter. Balance geoestratégico. Le Monde, marzo
2011.
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